¿No te parece que cada día es más difícil salirse de la fila? ¿No sentirse un poco alineado? Estos llaveros te devuelven el control, de veras, te sentirás al mando de tu nuevo amigo. Él no lo haría, ¿Por qué le das la espalda? Hazte con uno de estos simpáticos llaveros de madera y metal que combinan piezas de diferentes artilugios; tu amigo Frankestein en tu bolsillo, o colgando de tu mochila. Ponle nombre, y te acompañará allá dónde vayas, ya que si lo pierdes, te juegas perder las llaves del coche, o de tu casa, o de tu cofre de los tesoros. ¿Eres de esas personas que llevan más llaves que San Pedro? Yo si. Amo. Quizás tenga complejo de amo de llaves como Alfred en la Mansión Wayne.
Volvamos. No voy a dibujar un escenario apocalíptico y tristongo pero lo de los robots se ha ido de madre. Estos que os presentamos hoy son una ricura. Aprovechad la ocasión porque merecen la pena. El envoltorio es un primor, ya que vienen en una bolsa de tela individualizada en tono metalizado que ya cuesta lo que vale el llavero. Si vuelves dentro de unos días, y cuestan más, que no te sorprenda. Avisado/a quedas. Sin acritud, por supuesto, que os tenemos más cariño que Wall-E a Eva.