Muñecos antiestrés para apretar hay muchos, eso lo sabemos todos, ahora bien, que den tantas ganas de apretujarlos como este lindo gatito, pocos. Parece que se encuentra recién salido de su clase de yoga y claro, apetece mazo apretarlo como si en ello te fuese la vida. ¡Ah! ¡Qué ganas de estrujarlo, madre! Esa sensación que trasmite de relax me da incluso más rabia. Es un buen regalo para los/as seguidores/as de los felinos, y también para aquellas personas que necesitan bajar un cambio y tomárselo con más mesura, es decir, todas. Es de espuma de poliuretano, lo que quiere decir en romano paladin, que está óptimo para darle unos buenos achuchones. Viene en una caja expositora que agranda la impresionante buena huella que deja este invento de la marca Gift Republic (República del regalo, nada ostentoso nombre), en un primer vistazo. Mantén las buenas costumbres de los/as aficionados/as de Sapoconcho; cómprate uno y regala otro. No falla.